Mi historia comienza con una llamada de auxilio de un vecino de un pueblo cercano a Soto, pero nadie le hacía caso, hasta que dio con las chicas de Corazón Animal. Yo ya estaba en las últimas y de hecho tanto ellas como yo, pensamos que ya había llegado mi hora de cruzar el arco iris. Pero al llegar de urgencia al veterinario, éste dijo que lo que necesitaba era reponerme de una desnutrición severa, soy un amor de gata, que ni un mal gesto he hecho cuando han estado pinchándome, o llevándome de un lado para otro. Debo tener como unos tres años, y seguro que cuando me recupere seré una pantera preciosa, de ojos color caramelo aunque ahora no esté en mi mejor momento.

Ya una vez me dieron el alta en la clínica, estoy en una casa de acogida intentando reponerme, y que por fín alguien me de amor y mimos que es lo que busco con todo el mundo. Si quieres me puedes apadrinar y contribuir con mis gastos, o si quieres ser mi familia definitiva escribe a asociacioncorazonanimal@gmail.com

11-7-19

He dado un buen susto a mi casa de acogida, de repente dejé de comer, empecé a encontrarme mal, y entré en coma glucémico. Las chicas de Corazón enseguida corrieron al hospital donde entré muy malita, me están intentando sacar adelante, pero mi glucosa y mi temperatura no terminan de centrarse, además tengo problemas de tipo neurológico, y en una primera valoración por mi analítica han pensado que tenga panleucopenia. Mandarme mucha fuerza, porque soy un amor de gatita que lo he pasado muy mal, y merezco un hogar donde me quieran.

12-7-19

Tristemente, no pude remontar mi situación de coma glucémico, y dejé a las chicas de Corazón Animal, destrozadas. Me pude despedir a mi manera, porque estaban conmigo ese día hablándome y dándome ánimos, pero cuando se fueron me encontré mal y ya no pudieron hacer más.